Manila.- Un fuerte pero profundo terremoto golpeó el norte de
Filipinas este viernes por la tarde pero no causó ningún daño
aparente, sólo sacudió edificios y forzó la evacuación de
oficinas y escuelas.
Los trabajadores de oficina y los estudiantes de la capital,
Manila, desalojaron brevemente sus edificios después de sentir los
fuertes balanceos y sacudidas.
Actualmente las autoridades locales no han informado la cifra de
heridos y muertos por el movimiento telúrico.
El Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología dijo que no
se esperaba ningún daño debido a que el terremoto de magnitud 6.3
alcanzó una profundidad de 160 kilómetros y no emitió ninguna
advertencia de tsunami.
Los epicentros más profundos a menudo causan menos daño en la
superficie de la Tierra, aunque se pueden sentir ampliamente.
El epicentro se encontraba a 16 kilómetros al suroeste de la
ciudad balnearia de Nasugbu, provincia de Batangas, a 65
kilómetros al suroeste de Manila.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que registra la
actividad sísmica mundial, localizó el hipocentro a 168
kilómetros de profundidad.
El mismo organismo situó la sacudida a 2.5 kilómetros al
noroeste de Putol y a unos 73 kilómetros al sur de Manila.
Filipinas se asienta sobre el llamado "Anillo de Fuego del
Pacífico", una zona con gran actividad sísmica y volcánica que
es sacudida por unos siete mil temblores al año, la mayoría
moderados.
/afa