Los constructores tamaulipecos temen que la desaparición del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa traiga consigo el desplazamiento de empresas, ingenieros y técnicos que se han especializado en la construcción y el mantenimiento de planteles escolares, señaló el presidente de la CMIC, Roberto Salinas Ferrer, al pedir que con otro nombre ese organismo aumente el presupuesto para el mejoramiento educativo, pues los 650 millones de pesos anuales invertidos en la entidad son insuficientes.
El dirigente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción en Tamaulipas indicó que su sector tiene el compromiso de colaborar con el actual gobierno, pero ante el rezago educativo de México el planteamiento es incrementar los presupuestos en la inversión en educación, además de mecanismos de colaboración entre los tres niveles de gobierno y transparentar el uso de los recursos públicos.