El Gobierno de la República firmó un acuerdo de colaboración con los gobiernos la Ciudad de México, Estado de México, Morelos y Puebla para realizar la disposición y manejo adecuado de los escombros generados por los sismos en varios estados del país.
De acuerdo con los criterios establecidos, los escombros no podrán depositarse en barrancas, áreas naturales protegidas (ANP), humedales ni en zonas de inundación con el fin de evitar la obstrucción del flujo del agua y posibles deslaves o erosión.
Será la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente se encargará exclusivamente de supervisar los sitios de competencia federal como las Áreas Naturales Protegidas, para garantizar que ahí no se confinen estos residuos.
Los representantes de los gobiernos locales dieron a conocer el número de sitios destinados a escombros que cada entidad ya tiene autorizados. Morelos reportó nueve, Puebla 15 y el Estado de México 30, de los cuales 21 serán utilizados también por la Ciudad de México.
Las bases se apoyan en el documento “Criterios para el manejo de los residuos de construcción y demolición generados por el sismo del 19 de septiembre para los estados de México, Morelos, Puebla y Ciudad de México”, elaborado por la SEMARNAT a través de la Dirección General de Fomento Ambiental, Urbano y Turístico de la Subsecretaría de Fomento y Normatividad Ambiental.
El Secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Rafael Pacchiano Alamán, señaló que la dependencia a su cargo apoya a los gobiernos estatales en la definición de los sitios de disposición y en las alternativas de reciclaje de los escombros.
Pacchiano Alamán exhortó a los gobiernos locales a aprovechar estos residuos principalmente para la reconstrucción de banquetas y caminos en las zonas afectadas.
La SEMARNAT elaboró una estrategia para evitar impactos ambientales y en la salud de la población y firmó convenios con estados afectados por los sismos del 7 y 19 de septiembre.